El DRM de Diablo III, que requiere que los jugadores mantengan una conexión constante a Internet, se encuentra entre las características más criticadas de este juego; sin embargo, la situación en América parece ser mucho más amable que en otras partes del mundo. Según reportes del sitio CinemaBlend, el pueblo alemán no está para nada de acuerdo con esta medida.
Aparentemente, la Federación de Organizaciones de Consumidores de Alemania está tan escandalizada por este requerimiento, que exigió a Blizzard reempaquetar Diablo III, de manera que el consumidor esté 100% enterado de la necesidad de mantener una conexión a Internet en todo momento.
Lo interesante es que el desarrollador tenía hasta el 20 de julio para consentir, cosa que no ha sucedido, por lo que la Federación esperará hasta el próximo viernes 27 y si Blizzard sigue sin responder a sus demandas, podrían presentar cargos. En caso de que este asunto llegue a las cortes es probable que la venta del juego se prohíba durante un tiempo en territorio germano, lo que sería otra enorme piedra en el camino de Diablo III.
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